Labyrinthe privé, merveille du monde.

viernes, 7 de enero de 2011

Y tu carita de reventada.



Es el invierno, la ventana,
y tu carita de reventada.
Disfrutamos madrugadas,
Bukowsky y chinos y carcajadas.
Pero no me importa.
No me arrepiento,
de haber perdido la libertad.

Si lo que viene después te asusta,
mejor te canto lo que te gusta.
Y si volvemos al pasado
te pido tu corazón prestado.
Pero no me importa.
No me arrepiento, de
que me guste.
(la noche)

La noche empieza y no va a poder parar,
Porque hace tiempo que no quiere llorar.
“La cocaína seca las lágrimas”
Y es el combustible del huracán.
Yo te cantaba, Lunita de Tucumán,
para que duela menos,
cada día más.

La noche empieza y no va a poder parar,
Porque hace tiempo que no quiere llorar.
“La cocaína seca las lágrimas”
Y es el combustible de mi ciudad.
Yo te cantaba, Lunita de Tucumán,
para que duela menos,
cada día más.



Si esta locura nos hizo comprender,
que la alegría no supo consolar,
deja que lloren tus ojos, corazón,
que tu tristeza es el Sol de mi ciudad.
Y esta violencia, regalo de mi papá,
me está doliendo mucho,
cada día más.

Yo quiero verte perfumadita,
con tu boquita pintada.
Que me llene de alegría,
que se apague mi dolor.
Y los efectos que nunca siento,
son los rebotes del viento,
que atrapa sueños.

Yo quiero verte perfumadita,
con tu boquita pintada.
Que me llene de alegría,
que se apague mi dolor.
Y los efectos que nunca siento,
son los rebotes del viento,
que atrapa sueños.


Yo quiero el beso perfumadito,
con tu boquita pintada.
Que me llene de alegría,
que se apague mi dolor.
Y los efectos que nunca siento,
son los rebotes del viento,
que atrapa sueños.





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