Labyrinthe privé, merveille du monde.

lunes, 31 de enero de 2011

Soy yo, era yo, siempre fui yo, seré yo?

A veces creo que nací al revés. Creo que viví al revés.
Como si nunca hubiera sido más que una repetición, o una secuencia de distintas etapas, o errores.
Ya sabés, como en la física, tengo un error absoluto, un error verdadero, un porcentaje.
Y mis mediciones son todas incorrectas, y soy un caleidoscopio roto, no proyecto colores, soy blanco y negro.
Y viven varias personas adentro mío, como si yo fuera una casa con muchos habitantes que nunca están de acuerdo, siempre se pelean y rompen cosas adentro mío. Y lloran, y gritan, y algunos se ríen. Pero todos están locos, y me conforman, y me dicen qué hacer,
todos al mismo tiempo.
Nunca se ponen de acuerdo, y siempre me dicen que lo que hice está mal, pero yo le hice caso a él y no a vos, entonces está mal o bien ? no sé.
Yo quiero aprender de mi pasado, y a la vez quiero olvidarlo.
Quiero poder dejar de ser la persona que fui, pero no quiero dejar de ser yo. Mi pasado soy yo. Me da vergüenza hablar sobre mí, pero debería estar orgullosa de quién soy.
Pero no sé qué pensar, no sé cómo debería encajar dentro de mi propio molde porque yo nunca lo hice, yo nunca encajé ni siquiera conmigo misma.
No sé bien por qué yo vivo al revés, y quisiera encontrar a alguien que me pudiera realmente entender, alguien que vaya más allá de consuelos vanos, y consejos estándar.
Quisiera vivir a color, y ser yo, siempre ser yo.
No ser más una ramificación, ser un solo tronco que crece uniforme y parejo, y dar todas las flores que pueda.
Pero realmente, mis ramificaciones viven en invierno, es como si no pudiera ser capaz de tener hojas, o flores, o lo que fuera.
A veces siento que debería haber sido un varón. A veces me gusta ser mujer.
A veces siento que necesito la atención de los demás, a veces siento que yo debería prestarle atención a los demás y callar mi interior.
Siento que no tengo lugar, y a la vez, que el espacio me queda demasiado grande.
Callá, calláte, y no digás más.
Desbordante es mi sensación y mi emoción, y ya no la puedo mantener adentro.
Un día voy a explotar, de mí van a salir miles de arcoiris y verdades, y el cielo, adornado con mis miles de estrellas.
Un día voy a poder decir, soy yo.
[ Dáme la mano, ya no sé salir de este torbellino, y las risas y las lágrimas se mezclan y me aturden, me hacen danzar y me hacen confundirme en este movimiento lineal, estático, inmóvil y a la vez rápido y viviente, quiero gritar y quiero espacirme, y estallar. ]

No hay comentarios:

Publicar un comentario