Me dí cuenta de que siempre que yo estuve mal,
alguien estuvo igual, o supo cómo me sentía.
Mis depresiones, mis temores, mis odios internos, todos,
los podría haber compartido con alguien.
Pero a veces, uno se siente solo porque quiere.
Uno se odia porque quiere.
Uno sufre y se castiga, se lastima, porque quiere.
Llora solo porque quiere.
Qué solitario es sentirse solo estando solo.

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